El ser humano, a lo largo de su vida, afronta crisis entre ser objeto y el ser sujeto, objeto de sus responsabilidades y sujeto de las emociones. Si se vuelve incapaz de sobrellevar esta dualidad, elabora entonces estereotipos patológicos de respuestas, entre ellas la depresión, desorden psiquiátrico que alcanza el 8 por ciento de la población mundial, responsable de más del 90 por ciento de los suicidios. La conducta suicida es una emergencia psiquiátrica que como médicos debemos identificar, considerando los factores que intervienen la conducta; la elaboración del plan, su potencialidad y ejecución, es el objetivo del siguiente artículo, y en el mismo no enfocamos su tratamiento porque un intento de suicidio dentro de un cuadro depresivo mayor, exige la internación del paciente. Notaremos que la incidencia es mayor en hombres jóvenes que poseen ideas de reproche de corte delirante o enfermedades orgánicas que las viven como terminales. Por último es de vital importancia el analizar los intentos de suicidios, pues de cada 18 intentos es sabido que 1 culmina en muerte, y que cada intento aumenta el riesgo por individuo unas 6 veces más...