Rev. cient. cienc. salud; 2 (1), 2020
Año de publicación: 2020
Introducción:
La alteración en la percepción de la imagen corporal es una
característica de ciertos trastornos de la conducta alimentaria. Entre los grupos de
riesgo se encuentran los estudiantes de nutrición. Objetivo:
Determinar la
concordancia entre el estado nutricional real y la percepción de la imagen corporal
de estudiantes de primer y segundo año de la carrera de nutrición de universidades
privadas de Asunción en agosto de 2019. Método:
En un estudio analítico de
correlación, se incluyeron 97 estudiantes por muestreo no probabilístico. Se empleó
un cuestionario autoadministrado de datos sociodemográficos, el estado nutricional
real se determinó por el Índice de Masa Corporal y la percepción de la imagen
corporal por la escala de siluetas de Stunkard. Se consideró distorsión de la imagen
corporal cuando la diferencia entre el IMC real y el percibido estuvo por encima o
debajo de -2 y +2; para las asociaciones entre variables se consideró un valor
p<0,05 como significancia estadística. Resultados:
El estado nutricional real fue
normal en el 68% y el 36% tuvo distorsión de su imagen corporal. La concordancia
entre el estado nutricional real y la percepción de imagen corporal fue moderada
(Kappa 0,491); la discrepancia entre el IMC real y el percibido fue mayor en
quienes presentaron bajo peso y exceso de peso. Conclusión:
Los estudiantes con
bajo peso sobrestimaron su peso lo que podrían ponerlos en riesgo de algún
trastorno de la conducta alimentaria y quienes subestimaron su peso son pasibles
de padecer obesidad por no dimensionarlo como un problema.
Background:
Alteration in the perception of body image is a characteristic of
certain eating disorders. Among the risk groups, students of nutrition career are
found. Objective:
to determine the concordance between the actual nutritional
status and the perception of the body image of first and second year students of
the nutrition career of private universities in Asunción in August 2019. In an
analytical correlation study, a non-probabilistic sample of 97 students was included.
A self-administered questionnaire that included sociodemographic data was used;
actual nutritional status was determined by Body Mass Index and perception of
body image by the Stunkard silhouettes scale. Distortion of the body image was
considered when between the real and the perceived BMI it was above or below -2
and +2; for association between variables a p value of <0.05 was considered
statistical significant. Results:
Real nutritional status was normal in 68% of the
students; 36% presented distortion of their body image. Concordance between the
actual nutritional status and the perception of body image was moderate (Kappa 0.491). Discrepancy between real nutritional status and perceived body image was
higher in those who presented underweight and overweight. Conclusion:
Students
with underweight overestimated their weight which it could put them at risk of
some eating disorder, and those who underestimated their weight are likely to
suffer obesity for not dimensioning it as a problem.